Es conveniente saber que en el primer siglo de
vida republicana que tuvo el Perú existió un silencio absoluto en cuanto a la
creación de una arquitectura peruana propiamente dicha; entre 1821 y el año
1920, la arquitectura del Perú siguió modelos franceses e italianos como una
reacción contraria arquitectura impuesta por la colonia que nos dominó por
tanto tiempo y que se tomaba puramente como española.
Es así que la arquitectura del Perú adoptó formas arquitectónicas con influencia
estilística neoclásica e imperiosa; los vestigios arqueológicos que se estaban
descubriendo, ruinas pre incas e incas,
fueron vistas con agrado pero eran percibida por la sociedad peruana
como cosa lejana y curiosa que debían estudiarse.
El espíritu lírico y romántico de la época no
permitió que los peruanos nos diéramos cuenta que la arquitectura colonial en el Perú ya tenía
formas indígenas incorporadas y que era la única arquitectura que expresaba
totalmente la raza mestiza del país.
La arquitectura colonial peruana se establecía,
entonces, en un determinado suelo y clima y buscaba tener un sentido plástico y
colorido; con formas resultantes de las propiedades de los materiales que
existían en su medio buscando esa relación de arquitectura y medioambiente.
Fue
la exaltación
libertadora la que hizo que se rechazara la arquitectura colonial, porque les recordaba
al dominio español, sin pensar que esta ya era peruana; y no deseándose seguir
con ella se hicieron las primeras construcciones denominadas republicanas con
las utilizando la técnica criolla de adobe y quincha, regularizando los patios
con la forma cuadrada, buscando la simetría en planta y fachada de las
edificación de tal forma que ordene espacios y formas. En realidad la
trasformación de las construcciones coloniales en republicanas paso por la
forma más que por el fondo.
En este contexto, Piura, la primogénita ciudad que fundara la hispanidad en
territorio peruano contaba con muchas edificaciones heredadas del virreinato,
que sufrieron muchos daños durante el terremoto de 1912 y que fue este,
probablemente, el que propició su reconstrucción con las nuevas características
y materiales.
Hasta aquí
en el Perú no existía una institución encargada de velar por el tema cultural y
de identidad; sin embargo, los aires de
patriotismo y orgullo lograron que el
presidente de la república y el congreso vigente haga las primeras declaraciones de patrimonio
cultural; y el 18 de diciembre de1942 declaran
patrimonio cultural la Catedral de Piura con Ley Nº 9694; y el 30 de diciembre
de 1944 declaran patrimonio cultural la Casa de Don Miguel Grau y Seminario con
Ley Nº 10146.
Hacia el
año 1962 se crea la casa de la
Cultura en el Perú, con el decreto supremo Nº 049, el 24 de agosto de 1962; así
como la Comisión Nacional de Cultura, la cual estaba facultada a establecer
filiales de la Casa de la Cultura a nivel nacional. En Piura la casa de la
cultura estuvo a cargo de Don Manuel Vegas Castillo y gozó de vigencia hasta
marzo de 1971 con su último director Don Miguel Oviedo Chamorro.
Esta
institución entonces propició que declaren patrimonio también, la Iglesia del
Carmen, la casa donde nació Miguel Seminario y Jaime (calle Lima 717 esquina
Ica 179) el 15 de octubre de 1974; la Iglesia San Francisco el 23 de
julio de 1980, el Malecón Eguiguren, el puente Piura (puente viejo)
y la 4ta y 7ma cuadra de la calle Lima,
el 15 de febrero de 1982.
El casco antiguo de la ciudad de
Piura tuvo múltiples ejemplos de
edificaciones de la época colonial y republicana, que luego de las lluvias de
1983 fueron declaradas patrimonio cultural de la nación, con más urgencia; por
representar el último bastión de la arquitectura representativa de Piura; en
ese momento el orgullo de una sociedad que estaba cambiando de la colonia a la república.
Patrimonio de la Región Piura: Zona Monumental de Piura y Monumentos
Hacia
1983 el Fenómenos de El Niño se presentaba en esta ciudad de una forma tan
desastrosa que arrasó con muchas de las edificaciones de Piura cuadrada, y nace
entonces la imperiosa necesidad de quienes estaban a la cabeza de la
institución de cultura, de proteger lo que aún quedaba como testimonio de
arquitectura colonial-republicana. El entonces Instituto Nacional de Cultura
(hoy Ministerio de Cultura), el 26 de
junio de1987, declara patrimonio cultural la Casa Seminario Temple, la Plaza de
Armas, La Plazuela Pizarro, la Plazuela Hermanos Meléndez, la Plaza Bolognesi,
la Plaza Grau y la Plazuela Ignacio Merino. El 9 de noviembre de 1987, declaran
95 casas de Piura cuadrada, como patrimonio cultural de esta ciudad, la Iglesia
la Merced y el área comprendida entre la Av. Bolognesi y San Teodoro; el rio Piura y la Av. Loreto, como la Zona
Monumental; el 17 de noviembre de 1999 se declara patrimonio cultural la Iglesia
Santísima Cruz del Norte y el 23 de junio del 2000 se declaran patrimonio cultural
el Cementerio San Teodoro.
Patrimonio de la Región Piura: Zona Monumental de Paita y Monumentos
Así
como hay patrimonio cultural en la ciudad de Piura, también lo hay en la región;
las declaraciones de patrimonio cultural se dieron de igual modo en otras
ciudades como: Ayabaca, Sullana, Catacaos, Talara, Sechura y Paita; y haciendo
un recorrido por estas construcciones vemos que la sociedad de la época
mostraba ciertos criterios técnicos de construcción que hoy hemos dejado de
lado:
§ Los techos a dos aguas para evacuar
mejor el agua de la lluvia.
§ Los aleros al exterior,
cubriendo la vereda; e interior,
cubriendo la galería.
§ El diseño de canaletas y un
sistema de evacuación pluvial eficiente.
§ La colocación de teatinas
y/o claraboyas a fin de propiciar el
efecto chimenea, para evacuar el aire caliente y que los espacios se refresque
y ventilen con mayor naturalidad.
§ Las grandes alturas al
interior de los ambientes con motivo del agobiante calor.
§ La organización de los
espacios alrededor de uno o dos patios con la finalidad de iluminar, ventilar y
refrescar los ambientes.
§ Los vanos interiores y
exteriores (ventanas y puertas) amplios para ventilar e iluminar mejor los ambiente, ahorrando en muchos casos
energía en el día por que se evitaba encender alguna luminaria.
§ Las calles sombreadas por la
altura de las casas, los grandes aleros y su estreches.
§
El sistema de evacuación pluvial de las casas
daban a la calle después de la vereda.
§
El color de las casas en su mayoría era el blanco
con motivo de captar menos luz solar.
§ La aparición de múltiples
lugares públicos para disfrutar, como plazas y plazuelas con frondosos
algarrobos que amortiguaban el sol, el calor y buscar un lugar fresco donde
poder conversar en horas de la tarde.
Patrimonio de la Región Piura: Lobitos - Talara
Como vemos la
arquitectura del pasado es para la sociedad actual un referente que no debe
perderse sino más bien protegerse a través de la conservación de las edificaciones
monumetales. Muchas son las soluciones si existe la voluntad de recuperarlos,
el Ministerio de Cultura no tiene la responsabilidad exclusiva de velar por el
patrimonio cultural de la nación, sino también los propietarios de los
inmuebles y la sociedad a través de sus diferentes actores como: los gobiernos
locales, las empresas privadas y los ciudadanos.
Conservar no es congelar,
se debe hacer una arquitectura nueva de
calidad, que se integre al espíritu tradicional de la ciudad o zona histórica.
No se trata de hacer simulaciones o repeticiones, sino de integrar de manera
respetuosa la arquitectura nueva, con identidad local, a la ciudad antigua o
Zona Monumental.
En este sentido es de vital importancia la
educación: el educar y re-educarnos de
manera comprometida, iniciando esta educación con los niños pequeños,
enseñándoles el valor de las edificaciones patrimoniales, su historia y
conservación, para formar ciudadanos orgullosos de su pasado con identidad y
autoestima; que los lleve en su etapa profesional a apostar por la conservación
de sus monumentos dentro del contexto de la globalización.
Patrimonio de la Región Piura: Iglesia de Sechura
Bibliografía:
- Archivo de la Unidad de Patrimonio, Colonial y Republicano
Dirección Regional de Cultura de Piura.
- La Arquitectura en 20 lecciones.
Hector Velarde.